Franquicias La Mafia. Entrevistamos a su Franquiciado, Maite Floristán

-¿Qué le llevó a escoger este sector para iniciar su actividad como franquiciado?

En Tudela hay buenos restaurantes pero muy caros y especializados en verduras. Vi un más que posible hueco para un restaurantes de las características de LA MAFIA

-¿Qué diferencias encontró en La Mafia se sienta a la Mesa que le hicieron optar por esta franquicia?

Me gustó mucho la idea de cocina Italo-Española. A veces no se quiere ir solo a una pizzería o trattoria, a mi esposo, por ejemplo, no le gusta la pizza ni la pasta, pero podemos ir juntos porque en La Mafia puede comer un solomillo, creps o huevos. Esto hace que las edades de los clientes tengan una horquilla mucho más amplia. Se capta clientela desde 17 años hasta los 70 sin dificultad. Ademas el precio es muy bueno, el servicio excelente y la calidad y cantidad óptimas.

-¿Cómo ha sido la atención recibida por la Central antes y después de la firma del contrato de franquicia?

La atención de la central es constante y muy satisfactoria. Cualquier problema que tengo, me dirijo al teléfono del franquiciado y me lo intentan solucionar con la máxima protitud. Incluso alguna vez me han llegado a enviar un cocinero o camarero en momentos críticos. Yo diría que la atención es muy buena

-¿Qué ventajas o desventajas se encuentra un franquiciado de La Mafia se sienta a la Mesa respecto a una tienda individual?

Hay que pagar un royalty, que a la corta te parece mucho, pero en cuanto pasan unos meses ves que es más barato que hacer tú mismo tus estudios de platos, mercado etc. No he de preocuparme de cambiar la carta, de comparar precios, de buscar proveedores etc. Además lo más importante es que no necesito cocineros con alta cualificación y alto salario, ya que todo me viene casi hecho. También resaltaré a homogeneidad del producto. El cliente sabe que lo que pide hoy es igual que lo que le gustó ayer.

-Si tuviera que partir de cero; ¿apertura individual o a través de franquicia?

Volvería a franquiciarme. Hoy día es muy difícil partir de cero con un negocio. Siempre se ha dicho que el “pez grande se come al chico” y en este caso es cierto. Un restaurante solo no hace nombre en años. Incluso a Arzak o a cualquier cocinero reconocido le ha costado mucho tiempo y dinero llegar a ser rentable. Con una franquicia obtienes rentabilidad casi desde el primer día.